Los complementos de tipo multivitamínico y multimineral proporcionan un aporte extra de los micronutrientes que también encontramos en los alimentos, pero a dosis más concentradas. Su efecto es nutricional o fisiológico.
¿Qué suelen contener?
Vitaminas solubles en agua. Estos son el complejo de vitamina B y la vitamina C. No se acumulan en las células del cuerpo y son fáciles de entrar y salir del cuerpo.
Vitaminas solubles en grasa. Son solubles en grasa y se acumulan en las células de nuestro cuerpo. Por tanto, debemos saber cuántos los necesitamos individualmente. Son las vitaminas A, D, E y K.
Minerales Suelen incluir calcio, zinc, hierro, cobre, magnesio, fósforo, potasio y selenio.
Algunos también pueden contener antioxidantes, como carotenoides (licopeno, luteína ...) y polifenoles.
¿Qué tipos existen?
Existen varios complementos alimenticios que contienen vitaminas y minerales. Por eso es tan importante elegir en base a criterios objetivos: necesidades fisiológicas personales, existencia de enfermedades o ingesta crónica de fármacos, estilo de vida y hábitos tóxicos. También se debe tener en cuenta la preferencia al tomar: tabletas o cápsulas, tabletas masticables, gotas o gránulos disueltos en agua o tomados directamente.
Los suplementos deben combinarse con objetivos y recomendaciones claros. Los suplementos no deben confundirse con los medicamentos, pero incluso si el primero es una fuente natural de nutrientes, siempre es necesario comprender sus efectos fisiológicos de antemano y seguir el tiempo de suplemento recomendado.